Las personas dicen que existen claves para sentirse bien y estar saludables. Para nosotros en El Moncayo, la clave para sentirnos bien fue trabajar duro para que nuestros consumidores logren esa meta. Siempre fieles a nuestro producto, la mejor manera de salir adelante fue alineando los valores que nos enseñaron y aplicarlos a nuestra empresa. Cada paquete está hecho para uno.
Por esta razón, la mejor manera de contar nuestra historia como empresa es contar nuestra historia desde su origen. Todo comenzó hace 50 años. El creador de esta yerba era una persona que amaba tomar mate, pero no había yerba que le hiciera bien. Luego de un largo proceso de selección, llegamos a El Moncayo, una combinación entre el amor al mate y el cuidado de la salud. Las primeras fundas que se hicieron se fueron como pan caliente. Esta combinación, lleva más de 20 años en el mercado llevando felicidad y bienestar a nuestros hogares.
Hoy, tres generaciones después, la empresa creció y conserva el mismo cariño y dedicación que desde un principio. El mismo amor que le dedicó su creador, lo heredaron sus hijos, y es por esta razón que yerba El Moncayo sigue creando productos únicos e inigualables. Cabe destacar que nuestros queridos moncayistas han sido una parte muy importante en todo este proceso, y por eso les queremos agradecer. Sin nuestros fieles consumidores, el amor por lo que hacemos no sería el mismo. Es por esto que les damos la bienvenida al mundo de El Moncayo.
La yerba que comenzó con una creación artesanal se fue perfeccionando mediante investigaciones en su fórmula hasta lograr agradar a todos los paladares, ahora puede ser disfrutada por nuestros consumidores en todas sus variedades.